“El arte supremo de enseñar es despertar la alegría en la expresión creativa” A. Einstein.

Aquel que recibe una información, un entrenamiento, una materia teórica o práctica se lo conoce técnicamente como “alumno”. La palabra alumno proviene del latín alere que significa alimentarse y el docente, maestro, formador o instructor le proporciona ese alimento.

Dicho lo anterior, toda persona que esta frente a un grupo con el propósito de enseñar, tiene una gran responsabilidad de “alimentar” en conocimiento a ese grupo de personas. Es un proceso llamado enseñanza.

La enseñanza es la transmisión de conocimientos, ideas, experiencias, habilidades o hábitos a una persona que no los tiene, pero la clave de ejercer una enseñanza efectiva está en la forma y las herramientas que el docente o instructor aplica en ese proceso.

Es importante que se cumplan ciertas etapas del proceso de enseñanza para poder lograr el aprendizaje deseado. Estas etapas son:

1.- Conceptos

2.-Nuevas aplicaciones

3.-Experiencia

4.- Reflexión

En la actualidad ya no es efectivo enseñar de forma que el docente o instructor hable y exponga el tema y los participantes o alumnos solo escuchen. Aquel que enseña, deberá de llegar a las emociones primero para poder atrapar la atención y generar un aprendizaje que perdure en el tiempo. Un gran ejemplo de esto es la Taxonomía de Bloom; Benjamín Bloom, trabajó en un modelo de enseñanza aprendizaje en el cual se deben de atacar 3 grandes áreas de los participantes o alumnos; una es el área afectiva, la cual atacará la actitud, otra es el área psicomotora, la cual atacará las habilidades y una última que es la cognitiva, la cual atacará el saber.

Cuando uno como docente o instructor logra influir y llegar a estas 3 áreas, el aprendizaje se generará y los participantes o alumnos recordarán la información por mucho tiempo.

Por último, me gustaría cerrar con los 4 pilares de la educación según Jacques Delors los cuales son: 1.- Aprender a aprender, 2.- Aprender a hacer para poder influir sobre el propio entorno, 3.- Aprender a vivir juntos para participar y cooperar con los demás y 4.- Aprender a ser, como un proceso fundamental que condensa los 3 anteriores.

Por -Ing. Abel Iván Sánchez-Miembro DIRCAP